Caza fotográfica

Cada día son más los cazadores que se aficionan a la caza fotográfica, como una disciplina más de la fotografía de Naturaleza.

Comienza un nuevo año y en unos días se abren los periodos hábiles para la caza tradicional de perdiz con reclamo. (Al final del artículo incluimos un cuadro resumen de las órdenes de vedas de las diferentes Comunidades Autonómicas).

El ser humano desde sus orígenes como cazador, capturó las imágenes de los animales en la acción de ser cazados y las llevó a las paredes de las cuevas que habitaba. En nuestro país el ejemplo más representativo lo encontramos en las pinturas rupestres de la Cueva de Altamira, consideras com las más importantes del paleolítico.

En este artículo nos vamos a centrar en la fotografía de la perdiz roja, para capturar y conservar los bellísimos lances que se pueden contemplar mientras disfrutamos de la caza tradicional de perdiz con reclamo. Esta modalidad cinegética es muy apropiada para conseguir retratar a las perdices.

Sobre las cámaras fotográficas y sus objetivos no vamos a realizar ninguna sugerencia, pues como todos sabemos, son varias las marcas que disponen de los últimos avances tecnológicos en esta materia y además con renovaciones constantes en sus equipos.

En la caza no todo significa esfuerzo físico, sino antes ingenio e imaginación, no existe una actividad venatoria más integral como la de llegar a mimetizar las forma y los movimientos para acercarse a los animales sin despertar su desconfianza.

En la caza fotográfica hay que localizar al animal, aproximarse con mucho sigilo y tener la suerte de encontrar el escenario y la luz apropiada para realizar la foto. Además, para fotografiar aves necesitamos un hide o tienda de campaña de camuflaje con mangas o huecos para sacar los objetivo, lo que llamamos “tronera”.

Foto realizada con Nikon D80, Objetivo Nikon  DX 18-135 mm

Uno de los elementos para la práctica de la caza de perdiz con reclamo es el puesto o aguardo, que puede ser de construcción natural, (piedras o matas) o portátil con lona mimetizada, provisto de una tronera, pero para la caza fotográfica, al aguardo se le pueden confeccionar una más troneras, en la cara delantera y otras en el resto de las caras, que pueden ser simples aperturas, también se le pueden acoplar unas mangas para camuflar mejor el objetivo de la cámara y se le puede instalar un techo.

Foto realizada con Nikon D80, Objetivo Nikon  DX 18-135 mm

Por lo tanto, cazar con el reclamo de perdiz y al mismo tiempo realizar fotografías es una experiencia muy satisfactoria, al conseguir capturar unas imágenes que nos permiten recordar lo mejores lances de nuestra expedición cinegética. Es “vivir el paisaje” y estar en un estado de alerta continuo. La afición al reclamo de perdiz, goza como ninguna otra modalidad de estos ingredientes y es por ello la que despierta tanta pasión.

Periodos hábiles 2016